Nuestro primer acercamiento con la marca nos permitió conocer que el portafolio incluía, además de lubricantes, otras líneas de productos hasta ahora desconocidas por los distribuidores, cada una con productos altamente especializados y con finalidades muy específicas.
Dentro de la etapa de planificación, el trabajo de arquitectura de la información (AI) cobró altísima importancia para organizar la gran variedad de productos y que fueran fáciles de hallar según la necesidad y en un funnel de la menor cantidad de niveles, lo cual se resolvió de manera óptima en el planteamiento de la experiencia de usuario (UX).
Finalmente, en el diseño de interfaces (UI) logramos plasmar de manera exitosa, los lineamientos globales de marca con mínimas observaciones de la casa matriz.